Nov 20, 2025
Las propiedades químicas de las baterías de LiFePO4 (fosfato de hierro y litio) y de plomo-ácido determinan sus diferencias significativas en cuanto a vida útil, eficiencia energética, dificultad de instalación y demandas de mantenimiento. Estas diferencias afectan directamente la estabilidad operativa, los costos a largo plazo y la aplicabilidad de las luces solares. sistemas de iluminación solar que dependen del almacenamiento intermitente de energía solar y necesitan un funcionamiento en exteriores a largo plazo, la elección de la química de la batería es crucial. Ciclo de vida y confiabilidad a largo plazoBaterías LiFePO4: Su estructura química es estable, lo que les permite soportar de 3000 a 5000 ciclos de carga y descarga. Incluso con descargas profundas, pueden mantener una larga vida útil de 8 a 15 años. Para las luces solares que requieren carga y descarga diarias, esto significa que pueden funcionar de forma estable durante mucho tiempo sin necesidad de reemplazarlas con frecuencia. Además, el sistema de gestión de batería (BMS) incorporado puede evitar sobrecargas, descargas excesivas y otros problemas que dañan la batería, extendiendo aún más su vida útil. Baterías de plomo-ácido: Su mecanismo de reacción química reduce considerablemente su ciclo de vida, generalmente de solo 300 a 1000 ciclos de carga y descarga. Su vida útil en aplicaciones de luz solar es de solo 2 a 4 años. Tras múltiples ciclos, los materiales de los electrodos a base de plomo son propensos al envejecimiento y la sulfatación, lo que reduce rápidamente la capacidad de la batería. Las luces solares que utilizan baterías de plomo-ácido requieren un reemplazo frecuente, lo que no solo aumenta la carga de trabajo, sino que también puede provocar que las luces queden fuera de servicio durante el período de reemplazo. Eficiencia de conversión de energíaBaterías LiFePO4: La reacción electroquímica durante la carga y descarga es eficiente, con una eficiencia de conversión superior al 90 %, y algunos productos de alta calidad pueden incluso alcanzar el 95-98 %. Esto significa que la mayor parte de la energía solar captada por los paneles solares puede almacenarse y convertirse en energía eléctrica para iluminación. La carga completa solo tarda de 2 a 4 horas, lo que permite que la batería almacene energía rápidamente incluso en días con poca luz solar, garantizando así la energía suficiente para las luces solares durante la noche. Baterías de plomo-ácido: Su eficiencia de carga y descarga es de tan solo el 70-80 %. La resistencia interna de la batería es relativamente alta y se pierde mucha energía en forma de calor durante la carga y la descarga. Además, necesitan de 6 a 12 horas para cargarse por completo. En zonas con poca luz solar, es posible que no se carguen completamente, lo que resulta en un tiempo de iluminación insuficiente para las luces solares por la noche, lo que afecta gravemente la experiencia del usuario. Instalación y adaptabilidad estructuralBaterías LiFePO4: Presentan una alta densidad energética y son ligeras. Una batería LiFePO4 de 100 Ah pesa solo entre 11 y 15 kg. Esta característica facilita enormemente la instalación de luces solares. No se necesitan equipos de elevación pesados y la instalación puede ser realizada por un pequeño número de trabajadores. Además, su tamaño compacto permite métodos de instalación flexibles, como la colocación vertical u horizontal, que se adaptan perfectamente a... farolas solares integradas y otros productos de iluminación solar compactos sin ejercer demasiada presión estructural sobre el poste de luz.Baterías de plomo-ácido: Son voluminosas y pesadas. Una batería de plomo-ácido de 100 Ah pesa entre 25 y 30 kg. Instalar luces solares requiere más mano de obra o incluso herramientas de elevación. Además, debido a su elevado peso, se imponen mayores requisitos de capacidad de carga del poste de luz y de la cimentación de la instalación. Para algunos soportes de iluminación solar livianos o escenarios de instalación en terrenos complejos, como senderos de montaña, el uso de baterías de plomo-ácido es muy restrictivo. Adaptabilidad ambiental y seguridadBaterías LiFePO4: Presentan una excelente estabilidad térmica y pueden funcionar con normalidad en un rango de temperatura de -20 °C a 60 °C, con una pérdida de capacidad inferior al 15 %. No son propensas a incendios ni explosiones, incluso en condiciones climáticas extremas, como altas temperaturas. Además, los materiales de... Baterías LiFePO4 No son tóxicos ni contaminan, lo que cumple con los requisitos de protección del medio ambiente.Baterías de plomo-ácido: Su rendimiento se ve muy afectado por la temperatura. Cuando la temperatura es inferior a 0 °C, su capacidad se reduce entre un 30 y un 50 %. A temperaturas superiores a 40 °C, existe el riesgo de fuga térmica. Además, las baterías de plomo-ácido contienen electrolitos de plomo y ácido sulfúrico. Si se dañan, el electrolito puede tener fugas y contaminar el suelo y el agua. Además, el plomo es un metal pesado tóxico, que también daña el medio ambiente y la salud humana durante su producción y reciclaje. Mantenimiento y costos a largo plazoBaterías LiFePO4: No requieren mantenimiento. No es necesario añadir electrolito ni realizar otras operaciones de mantenimiento regulares durante su uso. Aunque su costo de compra inicial es elevado, su larga vida útil y su baja frecuencia de reemplazo implican que el costo por ciclo a largo plazo es sólo 1/3 del de las baterías de plomo-ácido. Para proyectos de iluminación solar a gran escala, puede ahorrar muchos costos de reemplazo y mantenimiento.Baterías de plomo-ácido: Requieren mantenimiento regular. El electrolito se volatiliza durante el uso, por lo que es necesario revisarlo y complementarlo regularmente para evitar fallos en la batería. Su bajo coste inicial se compensa con los frecuentes costes de sustitución y mantenimiento. Por ejemplo, una batería de plomo-ácido para luces solares debe reemplazarse cada 2 o 3 años, y el costo de reemplazo acumulado durante 10 años es mucho mayor que el costo de una batería LiFePO4.
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